Distintas ciudades del país se adhirieron al llamado de la CUT. Trabajadores esperan que negociaciones terminen antes del 15 de noviembre.
Con tranquilidad se llevó a cabo la marcha convocada por la CUT para exigir un aumento salarial de un 8,8%. La movilización, que contó con la presencia de cerca seis mil personas y se desarrolló entre la USACH y Los Héroes, destacó por su orden y festividad. No obstante, los funcionarios públicos dicen estar perdiendo la paciencia, ya que sienten que el Gobierno no los escucha.
El mensaje de los dirigentes fue claro, ya que, según Barbara Figueroa, presidente de la CUT, quieren llegar a una solución antes de las elecciones.
La protesta no sólo se registró en las calles, ya que también hubo un paro en las institucional a nivel nacional, con balances positivos, según el Presidente de la ANEF, Raúl de la Puente; y adhesión mínima, según el Ministro de Interior, Andrés Chadwick.
El llamado a movilización también tuvo acogida en ciudades como Iquique, Antofagasta, Valdivia y Concepción, destacando las quince mil personas que se congregaron en la capital de la Región del Bío Bío.
Algunos sectores, como el Registro Civil y las urgencias de hospitales, continuaron con sus funciones por compromiso con la ciudadanía, según sus dirigentes.
El único punto negativo de la jornada fue la detención de un sujeto, quien insultó a los protestantes en Santiago y atacó a Carabineros cuando intentaron reprenderlo.
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