Los cuestionamientos hacia el uso medicinal de la cannabis y los efectos sobre la salud continúan en discusión.
Tras varias publicaciones hechas por académicos y Fundación Epistemónikos, la conclusión es que la marihuana es una sustancia que no ha demostrado efectividad para recuperar enfermedades y que lamentablemente además tiene varios efectos adversos, mientras que desde la Fundación Daya, ven estos resultados como una estrategia de querer proteger los intereses de la industria farmacéutica frente a este ejercicio de autonomía personal que ejercen los pacientes chilenos.
El producto químico intoxicante de la marihuana es el tetrahydracannabinol o THC. Estos son los efectos adversos de la marihuana completa, (no sólo el componente cannabidiol que es el usado para tratar enfermedades):
Según consigna el medio Psicoactiva, el humo de la marihuana contiene entre un 50% a un 70% más sustancias cancerígenas que el humo del tabaco. Añaden que se ha demostrado que un solo cigarro de cannabis podía causar más daño a los pulmones que cinco cigarrillos fumados uno tras otro, provocando constantes bronquitis, tos y sibilancias.
Otro efecto negativo importane es que produce síntomas psicóticos y paranoia. Según detalla Psicoactiva, en 2015 se encontró que el THC aumenta la paraonia y la depresión (aunque otros estudios señalan que ayuda a combatir esta última).
Detallan que la marihuana afecta a la memoria a corto plazo y estudios sugieren que los cannabinoides alteran todos los tipos de la memoria. Sin embargo, señalan que usuarios frecuentes podrían volverse tolerantes a los problemas de memoria que ésta puede causar.
Psicoactiva agrega que el consumo de marihuana genera falta de motivación. Esto se explica porque los consumidores a largo plazo presentan menores niveles de dopamina, un producto químico en el cerebro que es directamente responsable de la motivación.
Otros problemas que se indican, tienen que ver con la fertilidad y efectos nocivos en el embarazo. Pequeñas cantidades de marihuana pueden causar esterilidad temporal en hombres y alterar el ciclo menstrual en la mujer.
Según cannabis-med.org, su consumo puede agravar el curso de una psicosis o en personas predispuestas, puede desencadenar un cuadro psicótico.
Además, altas dosis pueden producir una importante supresión de distintos mecanismos del sistema inmune.
En tanto, el sitio drugabuse.gov asegura que existe una cantidad considerable de evidencia científica basada en investigaciones en animales y estudios en personas que indican que estar expuesto a la marihuana durante el desarrollo puede causar cambios dañinos a largo plazo o posiblemente permanentes en el cerebro.
“Estudios de imágenes diagnósticas en personas adolescentes muestran que al compararlos con aquellos que no usan marihuana, los consumidores empedernidos de marihuana manifiestan una conectividad neural atrofiada en ciertas regiones específicas del cerebro involucradas en una amplia gama de funciones ejecutivas del cerebro como memorizar, aprender y el auto control”, detallan.
Además, un estudio longitudinal a gran escala que se condujo en Nueva Zelandia, se encontró que el uso frecuente y empedernido de marihuana, empezando en la adolescencia, tenía una relación con una pérdida de un promedio de 8 puntos de coeficiente intelectual.
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